Yo he hecho esa ruta 3 veces... pero la última hace cerca de 10 años. Hablaré de lo que conocí yo.
La ruta del Cares son unos 11 kilómetros que se hacen desde un pueblo (4 casas contadas) llamado Poncebos a otro que se llama Caín (éste... unas 10 casas)... o al revés, pero si vas desde Bilbao, lo más cerca es Poncebos. El recorrido es ir y volver, que son los 23 kms.
Ir de Poncebos a Cain, por la orografía, suponen cerca de 100 kilómetros en coche. Hay gente que para no hacer andando la ruta de ida y vuelta, van en grupos en dos coches, uno a cada pueblo y quedan en cambiarse las llaves del coche en donde se encuentren del camino.
Dentro de la dureza que son 11 kilómetros del recorrido y andar pisando piedras del tamaño de puños todo el rato, el recorrido no es especialmente exigente. Pero sí es importante llevar calzado de suela rígida que evite que se destrocen los pies. Aunque yo he visto de todo allí... hasta gente con chanclas... mejor lleva calzado de monte.
Desde Poncebos inicias al de poco con una buena pendiente para luego comenzar a descender muy levemente y seguir más o menos llaneando hasta Caín. No es una ruta exigente en el sentido de librar desnivel.
En ese mismo recorrido, hay la opción de ir por la parte "de abajo"... y es que hay un buen tramo en el que se puede ir orillando el río durante un tercio del recorrido (desde la parte de Poncebos)
De las tres veces que he ido a hacer esa ruta, en dos ocasiones volvimos por esa parte de abajo.
No volveré jamás por ahí... casi pierdo a la madre de mis hijos por un desprendimiento en el que pasaron piedras de tamaño de sacos de cemento a velocidad de vértigo, a pocos metros de ella. Bajan a tal ost... que te aseguro que no te da tiempo a esquivarlas.
Pues el desprendimiento se debió a gente que iba por la de arriba y al arrimarse al borde provocó la caída de unas pocas piedras y éstas a otras... mientras se oían los chillos de la gente de arriba "¡Cuidado! ¡cuidado!"... a mí me pilló cien metros más atrás con la cámara enfocada para el otro lado... me quedé ojoplático y paralizado al oir los chillos, el estruendo y ver la gente corriendo para librar los misiles-roca... uuuuffffffssssss
También te digo, que toda la ruta es propensa a desprendimientos. Vayas por donde vayas.
A nivel visual... BRUTAL
Lleva todos los objetivos que tengas... los echarás de menos todos.
Bueno, siendo más lógico... imprescindible tu mayor angular, más que ningún otro.
Las paredes que tendrás por tu lado y el de enfrente son de centenares de metros para arriba sin final. Verás que por más que quieras exprimir el zoom a su posición de gran angular, seguirás sin conseguir meterlo todo. Te sentirás como una hormiguita entre tanta pared vertical.
Un buen tele te permitirá planos cortos de cosas con fondos alucinantes.
Aunque hay (había) un bar de camino...(un señor, que con un burro, sube latas y las mete en el agua de un canal artificial que acompaña el camino, creado para la pequeña central eléctrica) llevar bien de agua. No hay fuentes por ahí, sobre todo en verano, que está todo seco. Todo roca. Esfuerzo de por medio. Al llegar a Caín, meter los pies en el agua semicongelada del río, alivia los primeros 5 segundos... a partir del segundo 10, sientes como martillazos y no aguantas.
Disfrutad del paseo. Yo no lo olvidaré en mi vida... y de hecho quiero volver allí.
Algún día tendré que digitalizar todos los negativos que tengo de allí.
