DENBORA

“En exteriores para 'clavar' un balance de blancos exacto: dos fotos y me explico.
En la primera de ellas, integrar la carta gris en el paisaje, dentro del encuadre y composición decididos. Otra segunda foto, la buena, es decir, sin carta gris.
De esta manera, cuando abramos la primera de ellas en C1 podemos utilizar el cuenta gotas sobre la carta gris y eso nos dará un balance de blancos exacto. Con este parámetro ya definido, no nos cuesta nada pasar el valor a la foto definitiva.”

Esto es UNICAMENTE para calibrar el balance de blancos, es decir, la temperatura en Kelvin. Por supuesto, no tiene nada que ver con la relación apertura/obturación que hayamos ajustado a partir de la medición efectuada en la escena.



“En cuanto a la medición de la luz, ojo, la carta gris (reflectancia del 18%) no tiene en cuenta la reflectancia de los objetos integrados en la escena ni los brillos especulares. Si hacemos una medición sobre ella, llenando todo el encuadre con la superficie de la carta, la medición sera exacta para todo aquello que sea gris medio. Así pues, hay que tener muy en cuenta la reflectancia de los objetos que se incluirán en la composición.”

Con esto he querido decir que independientemente que midamos la luz de la escena con la carta gris, debemos tener presente dónde tenemos las altas luces –si las hubiese- y tenerlas en cuenta a la hora de la medición, de tal manera que si la carta gris arroja una relación apertura/obturación de ‘X’ y las altas luces se nos van a ‘X+3’ sería necesario subexponer un punto para asegurarnos que el CCD no llega a su saturación.



“Todo lo contrario, tendrías que sobreexponer y por una razón:
Si partimos de que una carta gris es el gris medio y la relación apertura/exposición la hacemos en base a esa reflectancia que tiene la carta... es fácil suponer que si queremos sacar un color blanco cuya reflectancia, por supuesto es mayor que nuestra carta, nos saldrá un blanco deslavado, sucio.”


Si estamos midiendo sobre una carta gris y en la escena tenemos un blanco que queremos que sea blanco, deberíamos también medir puntualmente sobre él y tratar de llevarle de algo menos de 2 puntos hasta un poco más allá de este valor (dependiendo de cómo incida la luz en él) sobre la relación de exposición arrojada por la lectura.

Podemos tomar como referencia un sinfín de motivos para "suplantar" la carta gris -lectura en la mano y compensación por arriba, en función de lo clara que sea la piel; medición sobre el cielo del norte; medición sobre el verde claro de la hierba, medición sobre rojos...- pero ninguno de ellos puede sustituirla.

Realmente da igual usar una cartulina blanca o gris. Lo único que necesitas es que la superficie no tenga ninguna dominante de color. Por eso te sirve el blanco y el gris (da igual que gris sea). Eso si, si usas una cartulina blanca, importantisimo que no se te queme en la exposición, porque entonces no te sirve para el cálculo del balance de blancos.

Una curiosidad: si expones la cartulina blanca para que no se te queme, en la practica ¿que tienes en la foto? -> una cartulina gris clarito, clarito.