Primero de todo… hacer fotos es como cantar u oír música… depende del estado de ánimo, te van unas melodías u otras, marchosas o lentas…
En mi caso, hay días en los que me apetece ir sólo con la cámara a cualquier sitio buscando "no sé qué que aparezca", de los que no espero nada concreto y cuando después veo las fotos en el monitor, generalmente son escenas estáticas, hasta tristes. Otros días en los que estoy con el "mono" de dispararle a lo que sea, resulta que consigo imágenes más dinámicas y alegres.
Pensando en por qué me ocurre, encuentro diferentes acciones y reacciones en mi actitud… en los primeros casos suelo ser muy pasivo, simplemente contemplo las cosas y las encuadro; y en los segundos, me acerco más a las personas, las abordo, hablo con ellas, las activo… y el resultado cambia muchísimo. ¿Para bien? No lo sé… diferente.
Con todo este rollo metafísico, quiero aportar mi pequeño grano de arena en la cuestión. Mi opinión es que a todos nos pasan estos mismos sentimientos y estados de ánimo; son normales… y quizás hasta saludables.
Yo me considero una persona bastante social. Necesito relacionarme con gente para sentirme bien (supongo que como el 99% de la población mundial) y la fotografía, Denbora, los cursos… todos vosotros

me ayudan mucho a ello. Te pongo el ejemplo del post que puse el otro día con lo de la "pasión de Balmaseda"; si llega a querer venir alguno de vosotros hubiese ido…. y al final, sólo, pues no fui.
Y por supuesto, todos tenemos nuestros días… pero como te han comentado, apóyate en otros para obligarte a hacer fotos (si es lo que te apetece, claro), a mejorarlas, a buscar motivos…
Y por último, quizás sea tu subjetividad la que no te hace valorar las fotos que has hecho. Quizás a los ojos de un tercero hayas hecho fotos tan buenas entre ellas como las de otros momentos en los que estabas con más motivación.
En cualquier caso, ánimo con lo que te pida el cuerpo hacer (fotografía, surf, cometas, coleccionar sellos, senderismo, etc)… y como dice un motivador famoso: "No te preocupes por tu vida que nadie sale vivo de ella… y ¡vive!"
Un abrazo fuerte.
¿Porqué no te pasas por los cursos a echarnos una mano? … se me ocurre
